Retrato de Margarita de Saboya

Francesco Moretti
pintura en vidrio
1881

Francesco Moretti era partidario de la vidriera pintada: la obra en la que concentró todo su arte y todas sus convicciones fue el Ritratto di Margherita di Savoia (Retrato de Mararita de Saboya), realizado en 1881 sin ningún encargo, a partir de un retrato oficial de la soberana, elegido como tema por su papel y popularidad. Desde el punto de vista estilístico, Moretti quiso pintar sobre vidrio como si fuera un lienzo, utilizando la técnica aprendida en la Academia para pintar al óleo: pequeños trazos paralelos de color y pintura en la punta del pincel para dar relieve y tridimensionalidad a la imagen.

Desde el punto de vista técnico fue aún más innovador, atreviéndose a realizar cortes extremadamente difíciles, en términos de forma y tamaño, nunca antes realizados. La mina que eligió también era muy fina y se integraba y se mezclaba perfectamente en el dibujo. Finalmente, quiso afirmar la idea de que el vitral no es solo una obra de artesanía, sino que puede considerarse, con razón, una verdadera obra de arte: no siempre conocemos los nombres de los creadores de vitrales medievales, mientras que el autor de los vitrales pintados se enorgullece de firmarlos como un pintor firmaría una pintura sobre lienzo.