La Virgen y el Niño con dos querubines
Museo de Palazzo Baldeschi
Pietro Vannucci, llamado il Perugino
Temple sobre madera
última década del siglo XV
La pintura revela la perfección de dibujo del maestro y su rara habilidad para afinar la iconografía de lo sagrado, anticipándose a Rafael, incluso en una pintura de pequeño formato. La historia de esta tabla es desconocida antes de 1847, año en el que entró a formar parte de la colección de Sir Holford en Londres. Se expuso con la atribución a Perugino en la Exposición de Arte Italiano Antiguo en la New Gallery de Londres (1893) y, unos años más tarde (1910), en la Exposición de Pintura de Umbría en el Burlington Fine Art Club también en Londres, cuando se hipotizó que formaba parte de un tríptico cuyas alas incluían las imágenes de San Sebastiano e San Girolamo.
Las cabezas de los querubines, previamente cubiertas con barniz oscuro, volvieron a la luz tras una restauración realizada en 1927. Puesto a la venta en ese mismo año, el cuadro llegó a la colección Robiolio de Biella, donde permaneció hasta 1987, cuando fue adquirido por la Cassa di Risparmio di Perugia. Perteneciente a la plena madurez de Perugino, estilísticamente cercana a la Pala dei Decemviri (Retablo de los Decenviros), anteriormente en la Cappella dei Priori de Perusa, ahora en la Pinacoteca Vaticana, la pintura puede fecharse en la última década del siglo XV.