Justicia, Fortaleza, Prudencia y Templanza

En el minucioso geometrismo de las cubiertas de madera de las bóvedas y paredes, la Mercancía no carece de un momento pictórico-plástico, situado sobre el pérgamo (púlpito) desde el que se hacía justicia en las disputas mercantiles. De esta forma, se introduce el color en un ambiente caracterizado por los tonos marrones de las esencias de madera.

De la temática surge la concepción, de incipiente matriz humanística, típico del ius mercatorium transversal aplicado por quienes tienen su reserva en la Comuna libre: laica, diferente del ius particulare local, pero legitimada por la auctoritas de la que emana este último, no basada en símbolos de lo trascendente sino en las virtudes inmanentes del buen juez. El juez, de hecho, comunica el derecho bajo la insignia, sobre fondo rojo cinabrio, de Civitas (el Grifo rampante, escudo de Perusa) y de Arte (el Grifo passante sulla balla di tessuti (Grifo que pasa por encima del fardo de telas), escudo de la corporación), movido por las cuatro Virtudes Cardinales: en el orden Giustizia, Fortezza, Prudenza e Temperanza (Justicia, Fortaleza, Prudencia y Templanza).

Los bajorrelieves de las Virtudes están cubiertos de pan de oro sobre un fondo azul. La Templanza y la Prudencia están en línea con la iconografía tradicional, mientras que las otras Virtudes presentan soluciones poco comunes. La Fortaleza, además de sostener una columna, también sostiene un yunque en su mano. La Justicia está representada de manera prerrenacentista, todavía sin la espada griega: sostiene la espada, pero no hacia arriba, sino en el acto de atravesar a un animal por debajo, lo que simboliza el mal, mientras que en el escudo aparece la inscripción "SUUM IUSTITIA" en gótico.